miércoles, 29 de octubre de 2008

Ebrio, cómo siempre. Alcoholico de pies a cabeza. ¿Por qué te sigo esperando? Si todos sabemos que tu verdadero hogar el el bar y que tus amigos son los vasos. Y para que decir quién es tu verdadero amor. Y yo aquí, te esperé 10 años como esposa paciente. Ya me tienes aburrida. Con tus ir y venir me vuelves loca y no soporto ese aliento a ron barato con el que llegas después de una jornada de licor, esas jornadas que duran meses. Vamos, que te espero, grandisimo hijo de puta. Vamos si eres tan hombre como lo dice tu sexo, y puedes aguantar un par de meses. Cobarde. Por eso es que un amante llena mi tiempo libre, ¿lo ves?

No hay comentarios: